Paz y bien.
Gracias, gracias, gracias a esta parroquia por su confianza y hambre de Dios.
Gracias a todas las personas que habéis hecho hoy visible la misericordia de Dios.
Unas 100 personas hemos acudido a la convocatoria de la Virgen María, para consagrarnos, consagrar nuestros niños y nuestras familias al Inmaculado corazón de María.
Con el deseo de que Ella guarde nuestro corazón y nuestra vida, y ninguno de estos niños se pierda nunca en la vida.
1.- Nuestra primera acogida fue por los padres franciscanos, nuestros hermanos del Convento, que nos dejaron dejar nuestras mochilas, ir al baño, y salir del modo lluvia que nos habían anunciado para pasar al modo buen día y soleado que la Virgen nos ha regalado.

2.- A las 13:00h llegamos a la Capilla de las Apariciones, y celebramos una eucaristía con muchos momentos de explicación del por qué de esta consagración y esta eucaristía. Los niños Jacinta y Francisco nos explicaron como prepararnos para la Primera Comunión
Y nos consagramos con una oración. (que podéis leer al final de este post para seguir y cuidar esta consagración)
3.- A las 14:30 comimos nuestra comida de traje en el Comedor de los pobres de San Francisco. Extraordinaria acogida de nuestros hermanos franciscanos

4.- A las 16:00h, dos voluntarios de la parroquia nos hicieron un rastreo urbano y cristiano siguiendo 7 obras de misericordia presentes en la ciudad. Comenzando por el 'dar de comer al hambriento' en el comedor de San Francisco:

Y dar de beber al sediento, en esta fuente de San Bartolomé, que inicialmente, en siglos pasados habían construido los franciscanos:

5.- Terminamos ese tour en la Iglesia de Santa María, donde D. Javier Porro nos explicó y nos apasionó con las historias de la creación grabadas en sus piedras, y nos regaló una escalada a la torre de la iglesia.

donde pudimos tocar las campanas!!!!

Gracias, gracias, gracias a la Virgen María por habernos invitado a esta consagración. Gracias a todos los que lo habéis hecho posible, con vuestra fe y vuestra dedicación.
Pronto más peregrinaciones.
y el año que viene volveremos a Pontevedra
Bendito San Francisco de Asís..
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Oración de consagración:
ACTO DE CONSAGRACIÓN AL CORAZÓN INMACULADO DE MARÍA
NIÑOS:
Porque Jesús nos dijo en la persona del apóstol JUAN: «Ahí tienes a tu madre». Nosotros te llamamos: MADRE
Madre de Dios y Madre nuestra!., nosotros venimos a agradecerte que seas nuestra madre. Tú eres nuestra Madre, gracias por amarnos. Nada de lo que nos preocupa se te oculta.
Madre de misericordia, cada vez que rezamos un AveMaría hemos experimentado tu ternura providente, tu presencia que nos devuelve la paz, porque tú siempre nos traes a Jesús, Príncipe de la paz.
TODOS:
El ser humano ha perdido la senda de la paz. Tantos hogares han perdido la fe. Hemos desatendido el cuidado de nuestras almas. El testimonio que debemos dar a lo más cercanos. Hemos enfermado de avidez, de egoísmo y de ambiciones. Nuestros corazones se han endurecido porque nos comparamos entre nosotros en vez de mirarte a ti.
Vivimos en un mundo que está ignorando a Dios, convive con nuestras falsedades, alimenta la competitividad y la agresividad, acumula armas, olvida que somos custodios de nuestro prójimo. Hemos inventado la guerra y destrozado la unidad. Hemos conocido la indiferencia.
Por todo ello pedimos perdón.
HOMBRES:
En la pobreza de nuestro pecado, en nuestros cansancios y fragilidades, tú, Madre Santa, nos recuerdas que Dios nos está buscando y nos mira con amor y esperanza. Es Él quien te ha entregado a nosotros y ha puesto en tu Corazón inmaculado un refugio para cada uno de nosotros, su Iglesia.
TODOS:
Por eso recurrimos a ti, llamamos a la puerta de tu Corazón, nosotros, tus hijos queridos. Gracias por traernos a tu presencia. Tú sabes cómo desatar los enredos de nuestro corazón y las guerras en nuestras familias. Ponemos nuestra confianza en ti. Seguros de que tú acudes en nuestro auxilio.
MUJERES:
Así lo hiciste en Caná de Galilea, cuando apresuraste la hora de la intervención de Jesús. Repíteselo otra vez a Dios, oh Madre, porque hoy necesitamos ver su poder también en nuestra vida. Necesitamos yu ayuda materna para ser una familia unida.
NIÑOS:
Acoge, oh Madre, nuestra súplica.
Tú, estrella del mar, ilumina siempre nuestra vida.
Tú, arca de la nueva alianza, inspira nuestros caminos.
Tú, “tierra del Cielo”, trae la armonía de Dios a nuestro mundo.
Extingue el odio, convierte los lobos en corderos,
enséñanos a perdonar
.Líbranos de toda guerra, regálanos la fraternidad.
Reina de la paz, danos la paz.
TODOS:
Madre de Dios y nuestra, nosotros encomendamos y consagramos a tu Corazón inmaculado nuestras personas, la parroquia de San Francisco de Asís, la Iglesia y la humanidad entera, de manera especial los países en guerra. Haz que cese la guerra, provee al mundo de paz. Y a nuestras familias. Tú que has recorrido nuestros caminos, guíanos por sendas de paz. Amén.
Y repartimos esta copia de una postal que escribió Sor Lucía en 1945:


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