Conferencia de Fr. Santiago Agrelo Martínez en el Ciclo Líneas Rojas 2025, organizado por la HOAC de la Diócesis de Cartagena y las Comunidades ´Cristianas de Base de la Región de Murcia.
Resumen de la ponencia de Fr. Santiago Agrelo
AL FINAL PUEDES VER EN VIDEO LA CONFERENCIA COMPLETA:
1. Trayectoria de Santiago Agrelo Martínez:
Nació en La Coruña en 1942.
Profesor de Sagrada Escritura en la Universidad de Santiago de Compostela.
Fue arzobispo de Tánger entre 2007 y 2019, lo que marcó un cambio en su misión, acercándose profundamente al mundo de los migrantes.
2. Experiencia y misión con los migrantes:
Su mirada se centra en "ver para acoger", defendiendo la dignidad de los migrantes.
Ha denunciado la violencia estructural, el rechazo y la indiferencia hacia los migrantes, especialmente en las fronteras del sur de Europa.
Ha criticado los discursos mediáticos y políticos que deshumanizan a los migrantes, asociándolos con el crimen, la amenaza cultural y el terrorismo.
3. Denuncia de las políticas de control migratorio:
Las políticas europeas, como el sistema Eurosur, priorizan la seguridad fronteriza por encima de los derechos humanos.
Los migrantes enfrentan situaciones inhumanas, violencia, hambre y muertes, muchas de ellas evitables.
Denuncia la hipocresía social y política que se manifiesta con lamentos vacíos ante tragedias pero con indiferencia ante los muertos de la migración.
4. Responsabilidad moral y cristiana:
La indiferencia hacia los migrantes es letal tanto para ellos como para quienes la practican.
La Iglesia debe ser una "Iglesia de los pobres", presente en las fronteras, acompañando y defendiendo a los más vulnerables.
Recordó que, en el Evangelio, Cristo se identifica con los pobres, los hambrientos, los enfermos y los presos.
5. Llamado a la acción y a la fe:
La Iglesia y sus miembros están llamados a ver, acoger y proteger a los migrantes.
Se necesita una teología de la presencia real de Cristo en los pobres, al igual que en la Eucaristía.
Apela a la conversión de las comunidades cristianas para que se comprometan con la justicia, la solidaridad y la misión de evangelizar a los pobres.
6. Crítica a la sociedad actual:
Denuncia el racismo, la xenofobia y la aporofobia institucionalizadas en la sociedad moderna.
Afirma que estas actitudes están destruyendo la humanidad y los valores cristianos esenciales.
7. Indignación por la manipulación informativa:
Denuncia cómo los medios de comunicación, influenciados por el poder, ocultan o distorsionan la realidad migratoria.
La representación de los migrantes como "criminales" o "amenazas" fomenta el miedo, la xenofobia y la insensibilidad colectiva.
Ilustra la falta de empatía social hacia la tragedia migratoria con ejemplos reales de noticias sesgadas.
8. Denuncia de la violencia en las fronteras:
Expone casos específicos de abusos en las fronteras de Ceuta, Melilla y Canarias.
Habla sobre devoluciones en caliente, golpizas y negligencia sanitaria, así como la complicidad de las autoridades.
Recuerda tragedias como los muertos en el Tarajal y en Melilla, enfatizando la falta de responsabilidad oficial.
9. Necesidad de compasión activa:
Critica la "parábola moderna" de indiferencia globalizada, comparándola con la ausencia del buen samaritano en la frontera.
Sostiene que los cristianos no pueden permitirse la indiferencia ante el sufrimiento humano, pues eso los aleja de Cristo.
10. Relación entre fe y justicia social:
Insiste en que la evangelización no es solo cuestión de doctrina o rituales, sino acción concreta en favor de la libertad, la justicia y la dignidad de los oprimidos.
Relaciona la misión de la Iglesia con la unción del Espíritu, que envía a los creyentes a anunciar buenas noticias a los pobres.
11. La opción preferencial por los pobres y la pobreza:
Afirma que la opción por los pobres incluye también una opción por la pobreza como camino de humildad, fragilidad y solidaridad.
Cristo, siendo Dios, se despojó de su poder para hacerse pobre y obediente hasta la cruz, modelo que la Iglesia debe seguir.
12. Reflexión final:
Agrelo concluye que solo una Iglesia pobre y comprometida con los pobres puede ser verdaderamente el cuerpo de Cristo.
Llama a la oración, el servicio y la fidelidad al Evangelio, con un compromiso profundo hacia los migrantes y los pobres.
.
Comments